La flora serrana se caracteriza por la resistencia a los cambios bruscos de temperatura y humedad. Las plantas más resistentes crecen hasta los 4 000 metros sobre el nivel del mar, y absorben la humedad de las constantes lluvias altoandinas.
La flora serrana se caracteriza por la resistencia a los cambios bruscos de temperatura y humedad. Las plantas más resistentes crecen hasta los 4 000 metros sobre el nivel del mar, y absorben la humedad de las constantes lluvias altoandinas.