El pueblo huanteño posee, como todo buen ayacuchano, un fervoroso espíritu religioso. Una de las principales fiestas se da en honor del Señor de Maynay cada 18 de septiembre, y es celebrada con procesiones, fuegos artificiales y bailes.
El pueblo huanteño posee, como todo buen ayacuchano, un fervoroso espíritu religioso. Una de las principales fiestas se da en honor del Señor de Maynay cada 18 de septiembre, y es celebrada con procesiones, fuegos artificiales y bailes.