Durante la década de 1980, la violencia terrorista obligó a los campesinos a autodefenderse, apoyados por el Ejército. Esta institución les proveyó de armas y municiones, y en muchos enfrentamientos lograron contener los embates terroristas.
Durante la década de 1980, la violencia terrorista obligó a los campesinos a autodefenderse, apoyados por el Ejército. Esta institución les proveyó de armas y municiones, y en muchos enfrentamientos lograron contener los embates terroristas.