Una costumbre funeraria de los chachapoyas fue la de construir un sarcófago de arcilla alrededor del difunto. La altura de estas construcciones va de los 80 centímetros a los 2,5 metros, y muchas llevan una falsa cabeza como se aprecia en la imagen.
Una costumbre funeraria de los chachapoyas fue la de construir un sarcófago de arcilla alrededor del difunto. La altura de estas construcciones va de los 80 centímetros a los 2,5 metros, y muchas llevan una falsa cabeza como se aprecia en la imagen.